Yo no creo que la red sea una amenaza para la profesión periodística. Muy al contrario, creo que es su tabla de salvación. Cierto, la profesión ha de adaptarse a nuevos tiempos pero eso es, siempre, un desafío. El auge de las tablets y de los eboks irá de la mano de nuevos formatos periodísticos de mayor profundización y análisis.Ante la sobrecarga informativa, los periodistas y medios reivindican, con razón, su labor interpretativa y analítica, que nunca podrá ser sustituida por la innovación tecnológica. En mi opinión, la clave está en elaborar contenidos que den una vuelta más y en la formación de nuevos géneros como el periodismo de datos.
Y es que el ciudadano ya no necesita un portavoz o una agrupación para expresar sus demandas y exigencias a gobiernos y empresas. La innovación tecnológica ha traído consigo la participación, cada vez más activa, de los ciudadanos en todos los ámbitos, como consumidores, como pacientes, como lectores, como votantes... Ahora empresas y organismos públicos deben aprender a interactuar con los llamados eCiudadanos de forma directa y sin intermediarios. Y los medios de comunicación deben incorporar estas nuevas fuentes a las redacciones.





